«Cada poema [suyo] es el cubo de una inmensa rueda.»
Julio Cortázar
«Si tuviera que escoger una cocina literaria para instalarme [...] viviría muy a gusto en la de Alejandra Pizarnik.»
Roberto Bolaño
«Al encanto de Pizarnik de ser una figura envuelta en el misterio y una personalidad inexplicable, hay que añadir el hecho de que palabra por palabra ella escribía la noche, y el lector que se acerque a ella descubrirá que esa escritura nocturna, que tenía un alto sentido del riesgo, nacía de la más pura necesidad, como a pocos escritores del siglo XX se les ha visto.»
Enrique Vila-Matas, Babelia
«Un hecho excepcional en la literatura argentina, que puede adjudicarse al aura de prestigio casi legendario que ha envuelto la vida y la obra de Alejandra Pizarnik.»
César Aira
«Una escritura que no acaba nunca.»
Winston Manrique Sabogal, El País
«Para la numerosa legión de los pizarnikianos, estas cartas serán una lectura golosa, incluso en los pasajes que parecen anecdóticos y banales, pues su voz está siempre bajo el control de una lucidez extraordinaria y de un deseo inquebrantable de poesía.»
Edgardo Dobry, El País
«Las cartas personales de la gran poeta Pizarnik desvelan parte de su enigmático universo. [...] Estas misivas son en sí mismas pequeñas obras de arte. Poética.»
La Voz de Galicia
«Cada poema [suyo] es el cubo de una inmensa rueda.»
Julio Cortázar
«Si tuviera que escoger una cocina literaria para instalarme [...] viviría muy a gusto en la de Alejandra Pizarnik.»
Roberto Bolaño
«Al encanto de Pizarnik de ser una figura envuelta en el misterio y una personalidad inexplicable, hay que añadir el hecho de que palabra por palabra ella escribía la noche, y el lector que se acerque a ella descubrirá que esa escritura nocturna, que tenía un alto sentido del riesgo, nacía de la más pura necesidad, como a pocos escritores del siglo XX se les ha visto.»
Enrique Vila-Matas, Babelia
«Un hecho excepcional en la literatura argentina, que puede adjudicarse al aura de prestigio casi legendario que ha envuelto la vida y la obra de Alejandra Pizarnik.»
César Aira
«Una escritura que no acaba nunca.»
Winston Manrique Sabogal, El País
«Para la numerosa legión de los pizarnikianos, estas cartas serán una lectura golosa, incluso en los pasajes que parecen anecdóticos y banales, pues su voz está siempre bajo el control de una lucidez extraordinaria y de un deseo inquebrantable de poesía.»
Edgardo Dobry, El País
«Las cartas personales de la gran poeta Pizarnik desvelan parte de su enigmático universo. [...] Estas misivas son en sí mismas pequeñas obras de arte. Poética.»
La Voz de Galicia